EL PERRO DEL SOL
POEMARIO
DE
RICARDO AZUELA ESPINOZA
EL LIBRO DEL OCHENTA
EL PERRO DEL SOL
PRIMERA PARTE
ME PESA MAS EN EL CUERPO
LA SANGRE DEL INDIGENA
QUE LA DEL CONQUISTADOR
UN DIA LLEGA UN POETA Y TE
RETUERCE LA EXISTENCIA
CARTA A UN HERMANO POETA
POETA Y HERMANO: hoy la noche me sorprendió en su conversión al día en Ruedas de hule caminando por los concretos solitarios, producto el cansancio que no permite canonjías al hombre normal.
El fuego grande y circunferente tocó mis ojos débiles a la oscuridad no (acostumbrados) cuando Teotltlatlauhca inició el parto e Tlahizcalpantecutli.
El arte llamó a las ventanas abiertas de mi espíritu
Y la máquina soporta mis dedos tecleantes.
Los vientos pensantes del Perú que cruzan al París inmortal de poesía
Refrescan mi ser inquieto de aventuras.
El corazón Acuario metamorfosea al cangrejo solitario y pleno de agua
Habitante de mares y espacios en México.
La historia huye de mis formas en tropel desorganizado inconsciente
De su derrota y el tiempo ocupa su lugar.
Las flores y los cantos de los Universos están de acuerdo y el poeta
Se nutre con ello y con la afirmación del Cosmos.
Sabe que el camino se ha iniciado y no quiere perder los pasos
que conducen al jardín habitacional de los Dioses.
Recreando, creando y formando mundos en la mente el pensamiento
En mil millones de formas razonadas, subjetivas y concretas.
Así mi despertar empieza, esparciendo lluvias, vientos y espacios
En el tiempo que los depredadores de hombres no me habían robado.
Los Alos positivos quieren abandonarme y los negativos desvainan (Las espadas)
Adivinadores mágicos de este trabajo y su destino.
Tres ejércitos interminables de ojos me protegen, un Príncipe poeta
Se encuentra al frente de ellos.
Su vestimenta se asemeja a la de aquel retrato que mi hermano el Poeta
Me obsequió antes de partir al Canadá.
Mas no se encuentra solo cientos de Dioses lo acompañan todos son nuestros
Veo con claridad a Quetzacóatl, Tescatlipoca, Huitzilopochtli y Zipetótec seguidos
De Yehuícatl, Yayauhca y Tonatiuh.
También los Dioses del Perú los acompañan a la delantera
¡Oh que hermosa raza Inca, dignos y esbeltos que grandes son!
Del brazo Wirakocha, Tikse y Kuniraya unidos a Chaac con sus Caques, Iques
Y Bakabes vestidos de rojo, blanco, negro y amarillo.
Tal es la imagen del insomnio que me posesionaba, el estado de vigilia
Que me embarga al escribir tu carta Poeta Espacial.
Voy regresando poco a poco al otro mundo no puedo evitarlo
Y mis cantos se tornan más burdos y mi grito más corto.
El Poeta se despide de su mundo, aborda una vez más la nave donde viaja
Y la tierra se va creciendo en relación a la velocidad.
Sin embargo tengo los pies en ella, en París la idea, la mente en la Poesía
Y el espíritu en el tuyo Poeta.
ESCUDRIÑAR PARIS DEL BRAZO
DE UN CLOCHARD Y VOLTEAR
LA CONCIENCIA A TU TIERRA
EL CANTO DE LA LLUVIA
EN DIEZ POEMAS
ESQUELETO DE LUCES
I
A dónde te escapaste esqueleto de luces
Que me manera tal expresas tus sonidos
gravitacionas cada vez más solo en el espacio
vienes de muy lejos y es el mismo planeta
deja ya que el agua, lluvia del viento, cese tus olvidos
vuelve y encuentra tus colores
que las chupar rosas pinchen tu alma
y beban y expulsen mieles
que las biznagas de tu mente viva
cosechen sus chilingos frutos del desierto
que tu pluma descubra una y otra vez
las vicileras repletas de mayo en junio
miel de hormiga bajo tierra
que tus versos de huizachales y mezquites gomeros
florezcan de primavera en el verano
donde encuentres nuevas grandezas matinales
al alba de alertas y optimismos
donde alimentes la almaciguera
de agua dulce filtrada en la paja
densa obscuridad en cisternas sin agua
encenderás de luces cuando llegue la aurora
recuerda la tapa de lampotillo y jara
no se hele la planta en este invierno.
DONDE REBOTA EL SOL
II
Recuérdate juguetón de ruinas que aullaban
De vientos colados al frente de tu antigua casas
Y ahora, en este sitio, donde los verdes cristalinos
No enchilan tu intestino regado de vinos
De este lado del Sena donde rebota el sol
Y sus rayos se acuestan en el agua
Aquí te querías ver bañado
En vallados y arroyos en otras lluvias lo habías hecho
Esta humedad y el agua son las mismas
Le dieron vuelta al mar por bajo tierra
Y tú creyéndote bañar en otras aguas
Escuchaste la torcaz en el disco de concierto de pájaros
Fue la misma del Ixtle con su canto temprano.
ALETEO DE GÜILOTAS
III
Recuerda cuántos surcos adoquinados dejaste atrás
Y cuántos adoquines barbechados encuentras
En tu nido nuevo de montes civilizados
Quién eres tu que ya no escuchas
El aleteo de güilotas al pardear la tarde
Llegando a los nopales con cazador oculto
A dónde estás viendo de tu fondo, despierto,
En echaderos de liebres asustadas
Recorriste tus veredas desnudas de noviembre en diciembre
Cuando plantabas, arriscando el pantalón,
Desprovisto de zapatos tus anhelos
Recuerda cuántos insomnios mantuviste
En lo obscuro y cuántos en la luz
Cuando el rayo caía en relámpago montado
Como tú iba cayendo hasta hoy que ves tu tiempo
Triturado en espacios estrechos en tan amplio espacio.
TLALOC TESTIMONIA
IV
Tu reloj mecánico quedó en Centroamérica
Ahora ya nadie te mide el tiempo
Volverás aunque sea flotando de ritmos en el aire
Soportando tu peso en bastones de magia
Nadie dirá que te vio escupiendo
Migajas de hambre al desnudo Sena
O cantando tus tardes de Mont Martre
En famélico vestido charro
Descompuesto desfiguro en el sostén anárquico
Cuánta vida contaminada oxigena tu presencia volátil?
Como la piedra porosa limpiaba tu agua en México
Así brindas en filtros a París
Tú presencia de cuerpo desvestida
Tlaloc testimonia con gran cortejo
De ranas de lluvia y de aguacero
Ometecuhtli a Huitzilopochtli dispuso tu cuidado
Tú adentro no es el mismo pero sigue parecido
Al de tus mozos años
Ahí también se reflejó la inocencia del devenir
Dos adentros encontrados adentro en edades distintas?
Un intermedio quiso joderte la existencia
Habitantes del agua te salvaron.
EL NOPAL Y EL MAGUEY
V
Tus aguamieles y tunas te impregnaron
De apostacías anárquicas en la segunda vida inocente
El nopal y el maguey te resguardaron
¡Cuántas tuzas dejaron su agujero
Para ver tu mito y tu leyenda!
Ahora vuelves esqueleto de luces luminosas
Testimoniando suertes de garrocha manca
Fiestas de poesía en usura
Comercio de piltrafas “Revolucionarias”
Deja pues tu esqueleto sin huesos
Y chupa los ramones en poesía
Las colmenas de tu tiempo si producen mieles
Mira cuantos milpales te rodean envueltos en versos jiloteros
Otros queriendo mazorquear
¡Cuánto piquete de justo desvarío recibirán en rostro
Los que a su precio han sido llegados!
No hay antídoto en la magia de la palabra
Tú espantarás los jicotes con ramas de pirul o de jara.
REFRESCANDO MEMORIAS
VI
Recuerdo lluvias de ventanas cerradas
Humedad conjugada de aromas
Tortillas de maíz recién salidas
En la olla el humeante frijol
Recuerdo rostros revestidos de hambruna
Recuerdo caras remarcadas de anemia
Recuerdo vientres pletóricos de hartazgos
Recuerdo polos de niños opuestos
Heredados y desheredados
En caravanas de miseria imperando los segundos
Sólo que nunca creí recordarlo
Escuchando sinfonías de Beethoven, Polonesas de Chopin,
El crepúsculo de los Dioses de Wagner!
Ni mucho menos al otro lado del mar
Donde París ofrece la vida muerta
Repiquetear de gotas hechas de agua
En cristales de soledad total
Vacío de ausencia de todo
A seis pisos de abajo para arriba
Encaramado en ajena habitación
Trinidad y sus voces llamando
Diciendo, refrescando memorias.
EL SOL NUEVO
VII
Los mares no se cruzan en vano
Ni se retorna con las manos vacías
Una respuesta a estas mentes huecas
El canto del cielo es escuchado
Dolor de continentes derramado por nubes
HERMANOS HERMANOS
No os desconsoléis en esta vieja Europa
Hay oídos abiertos por la doble sangre
El regreso no será de sonrisas ingenuas
Ya no chapotearemos el charco
Esta vez los cuerpos sin niños enrolados
Levantarán la imagen del Sol nuevo
Pronto veremos otra vez el verde
La conversión de colores circunda nuestras vidas
Sólo colores vivos vestirán nuestras ropas
Los muertos uniformarán de noir d’ivore.
EL INDIO AMENAZADO
VIII
Todos y nadie escuchamos el canto del agua
Mojando esta alma, reseca, colectiva
Que empieza a recibir el fresco líquido
Cruzando espacios de esta tierra
De aquí donde se ven mejor nuestras parcelas
El sutil “desinterés” de los vecinos
La “indiferencia” interesada de los alejados
La posible castración de los Mazaguas
El indio amenazado de exterminio.
PASOS SIN CONSIGNAS
IX
Hablo en recuerdo de los Dioses descalzos
De los hombres desnudos
De la lluvia consumiendo al polvo
Digo el primero que quiere recibirla
Os invito a salir del laberinto
Hábilmente tejido por la duda
Quién nos culpará en su poética equivocación?
Profecías desvinculadas de la vida?
Adivinanzas de un juego caprichoso?
Mis pasos no siguen consignas
Ahora mi voz es escuchada por la lluvia
Se responsabiliza de su propia conciencia
Tender puentes en espaldas ajenas es sencillo
Hay millones de niños que no saben de bromas en el hambre
Los cuatro costados del mar son testigos
Cinco continentes en manos de cinco
Así se hace la mescolanza en el poema
Hombre de ideologías cansado
Viene un novedoso despertar
Viento y agua refrescarán tu rostro.
INSTINTOS VIVOS
X
¡Basta ya!
¡Levantemos un muro a la mentira!
¡Hipocresía y poder van de la mano!
¡CUANTA RESISTENCIA AL REECUENTRO!
¡Lucirnos no resta nada a la miseria!
¡VENGAN Y ACARICIEN MI BRAZO ANONIMO!
¡El que hunde certeras puñaladas de fuego!
¡VENGAN Y SIENTAN MIS INSTINTOS VIVOS EN EL GRA APAGON!
¡Mis insomnios en estos dormitorios crepusculares!
¡Mis vigilias convocando un gran amanecer!
¡ESCUCHEN! ¡ESCUCHEN! COMO LLUEVE! COMO SILVA EL VIENTO!
¡COMO CANTA LA LLUVIA! COMO LLUEVE! COMO CANTA LA LLUVIA!
RICARDO AZUELA ESPINOZA.
París, Junio 3, 1978.